La glándula de Bartolino es un órgano diminuto que se
encuentra en cada uno de los labios (labios vaginales), cerca de la abertura de
la vagina.
Si comparamos la vagina con un reloj, estas glándulas se
encontrarían alrededor de las 4 y las 8 en punto. Normalmente, son invisibles.
Producen una pequeña cantidad de líquido que lubrica los
labios vaginales.
Si crece un colgajo de piel sobre la abertura de una de
estas glándulas, el líquido se acumula. Provoca una hinchazón redonda que se
llama quiste.
El quiste puede crecer, desde el tamaño de una moneda un
centavo hasta el tamaño de una naranja o más, aunque la mayoría no crece más
que el tamaño de una pelota de golf. Los quistes pueden ser sensibles al tacto.
Síntomas
Es posible que note una protuberancia levemente sensible,
redonda e indolora en uno de los labios vaginales, cerca de la abertura de la
vagina.
Es posible que se quede del mismo tamaño o que siga
creciendo lentamente. Los quistes que se infectan son, por lo general, muy
sensibles al tacto.
En los casos más graves, es posible que caminar o tener
relaciones sexuales sea doloroso. Su médico mirará el área para ver si tiene un
quiste y para determinar si este está infectado o no.
Causas
La mayoría de las veces, los quistes de la glándula de
Bartolino no están infectados. En algunos casos, sin embargo, pueden estar
provocados por una infección, o es posible que se infecten. Es posible que su
médico desee examinar el líquido presente en el quiste.
La mayoría de los quistes infectados, que se llaman
abscesos, contienen las bacterias normales (que también se llaman gérmenes) que
se encuentran en la piel. Algunos quistes infectados, sin embargo, son
provocados por bacterias de transmisión sexual.
Tratamiento
El tratamiento puede depender del tamaño del quiste, de
cuán doloroso sea, de si está infectado y de su edad. En algunos casos, un
quiste pequeño puede tratarse sumergiéndose en unas pocas pulgadas de agua
tibia (que se llama baño de asiento) varias veces al día, por 3 ó 4 días. Esto
permite que el quiste se rompa y drene con poco dolor o molestias.
En otros casos, el médico puede realizar un procedimiento
menor en el consultorio. Durante este procedimiento, el médico hace una
incisión y coloca un tubo pequeño, que se llama catéter, dentro del quiste.
El catéter permanece en ese lugar de 4 a 6 semanas y
drena el líquido. Luego, el catéter se quita con facilidad en el consultorio
del médico.
Si tiene colocado el catéter, puede continuar con sus
actividades normales, aunque debe hablar con su médico sobre la actividad
sexual mientras el catéter está colocado.
Otro procedimiento que también puede realizarse en el
consultorio del médico es hacer un pequeño corte en el quiste para drenar el
líquido.
Se colocan puntos en el borde del quiste para permitir
que se forme una pequeña abertura. Este procedimiento se llama
marsupialización.
Es posible que tenga una secreción leve por algunas
semanas.
Los protectores diarios deberían ser lo único que
necesita para cuidar de esta secreción.
Procedimientos menos comunes suponen el uso de un láser o
la extracción quirúrgica de la glándula entera. Ambos procedimientos se
realizan, por lo general, en un quirófano ambulatorio como cirugía sin
hospitalización.
Reincidencia
Es posible que los quistes de la glándula de Bartolino
vuelvan a salir después del tratamiento, a menudo, años después. Los quistes
pueden tratarse nuevamente, y las glándulas de Bartolino pueden extraerse por
completo si los quistes se repiten a menudo
Prevención
No hay manera de prevenir que se forme un quiste de la
glándula de Bartolino. Si cree que tiene un quiste de la glándula de Bartolino,
informe a su médico de inmediato, para que pueda recibir un tratamiento
temprano y eficaz.